Hace unos meses lloraba la pérdida de aquello que me había acompañado a lo largo de mi vida de constante lectora y hoy disfruto con el nacimiento de la continuidad, de la tradición bien mantenida, de un homenaje constante a lo que ha sido importante para muchos en esta ciudad. La Nova Colón está aquí ya.
Desde hace un par de meses disfrutamos de nuevo de los maravillosos consejos de Begoña, de sus preocupaciones por encontrarnos ese libro que nos hemos empeñado en leer. Es un revival absoluto de lo que era aquel local maravilloso de la calle Real, lleno de recuerdos, como ese viejo cartél que colgaba en la entrada, o ese suelo que no puede evitar que sientas que pisas las mismas baldosas ( un cuadro al fondo te hace ver que no es igual, sino que es tu subconsciente el que crea esa ilusión) y sobre todo, que el trato, el cariño, el que te sientas como en tu casa no ha cambiado ni un ápice.
En un momento en el que las masas se avalanzan sobre la FNAC ( entre ellas me incluyo, confieso) creo que todos demostramos con creces que en la vida hay sitio para las dos cosas, que sí, la magnitud del gigante francés nos absorbe, pero la calma, la calidez de nuestra librera estará ahí siempre y lucharemos para que así siga siendo.
3 comentarios:
Ya he hecho mis primeras compras en la nueva :-) Eso sí, después de haberlas hecho en la FNAC, gastándome el dinero que no tengo...
Un bico
¡¡Si que foi unha boa alegría!! ¡Cando pasei por alí e a vin aberta, querendo parecerse á antiga!
Estimado r.r.: la esencia y el espíritu sigue siendo el mismo, Bego se está encargando de ello. Sólo espero que todos sigamos siendo fieles ( reconozco que parcialmente, que la FNAC tira, son buenos en lo suyo).
Saludos y muchas gracias por su visita.
Publicar un comentario